Historia de un fracaso anunciado

Felipe Ferrin

Todo empezó cuando un jugador sevillano acosado por su propio nerviosismo de dejar un país donde no se sentía a gusto firmó un precontrato con nuestro club. José Antonio Reyes estaba pasando un mal momento en tierras inglesas y pedía desesperadamente a los clubes españoles que le trajeran a su país natal. Declaración tras declaración fomentaba el mal royo entre el Arsenal y el propio jugador. Entonces llegó el Atlético, un Pitarch recién llegado al club, contrajo un acuerdo con el Utrerano sin hablar con los gunners. En este contrato existía una cláusula que afirmaba que si el jugador firmaba con otro club tendría que abonar una cuantiosa cantidad al equipo colchonero. En estos momentos y a punto de acabar el mercado de fichajes aparece el Real Madrid. José Antonio Reyes mostrando una inmadurez propiciada eso sí, por las ganas de salir de Inglaterra llega a un acuerdo con el club madrileño y horas mas tarde se incorpora a las filas del Real Madrid.

Entonces ya teníamos suficientes razones como para despreciar a este jugador. Pero aquí no acaba la historia. Reyes exceptuando los últimos partidos de liga no cuaja una buena temporada y las nuevas incorporaciones que la prensa desinformativa "preveían" hace tomar la decisión al Utrerano de abandonar el club blanco.

Los incompetentes de nuestro equipo técnico deciden que sería un buen fichaje y pese a la negativa casi plena de la afición, Reyes es presentado con pitos en el Calderón. Además Jurado y Pablo hacían un Atlético mas "vikingo" que nunca. El descontento de la afición no les valía a los que se sientan en el palco y una vez mas demostraron lo poco que les importa el club, preocupados únicamente por un negocio, el negocio de la S.A.D.

El rendimiento del extremo fue prácticamente nulo, unido a una falta de continuidad por su bajo rendimiento. El Calderón mostraba su enfado contra él pero el jugador se lo tomaba a risa y contestaba a 55.000 personas con aplausos y sonrisas dirigidas a los que verdaderamente forman la entidad rojiblanca.

El descontento se convirtió en asco, y por fin se dio cuenta. Tras varios meses de pitos y desprecios el Utrerano no se sintió querido, lo reconoció en rueda de prensa.

Esta vez por lo menos el equipo deportivo asumió el error y tras varias semanas de negociaciones con el propio jugador y varios clubes se llegó a un acuerdo con el Benfica. Muy a pesar de Reyes que seguía empeñado en jugar con una camiseta que no se merece.

Como si de una rabieta de un crío de 7 años se tratara en las declaraciones que hizo en Portugal se dirigió a nosotros, además como más duele. "Por fin llego a un club donde puedo ganar títulos como en el Real Madrid"

Simplemente Reyes, quédate en Portugal por muchos años. Para jugar en España hace falta un nivel.

2 comentarios:

Marcos dijo...

La verdad, es que este jugador nunca me a caído nada bien. Se lo toma todo a pitorreo y con ironía. Un abrazo.

Ángel R. dijo...

Reyes ya me extraña que vuelva a jugar en el Atléticod,desde hace 2 temporadas,es mal recibido en el Calderón,venga,saludos!