Hemos vuelto

Felipe Ferrin

Dos palabras que significan mucho más de lo que puedan aparentar. El Atlético de Madrid, histórico tercer equipo de España vuelve a la máxima competición europea. Falta el último bache: el SCHALKE 04. El equipo alemán se ha reforzado muy bien y físicamente llegaran mejor que nosotros, es un partido bastante complicado a priori y más sin la principal baza rojiblanca: EL KUN AGÜERO. El argentino se perderá la IDA de la eliminatoria por compromisos nacionales al igual que su compatriota MESSI.

La pretemporada no ha ilusionado demasiado a los aficionados colchoneros, tan solo, la defensa nos da un respiro de tranquilidad. Falta gol, Sinama no encuentra portería y lo peor es que seguimos como hace 5 años, sin un jugador que tenga un mínimo de capacidad creativa. ¿Maniche? Es un jugador condenado a salir del atlético tapado por un velo de aprecio por el club para mantener su valor en el mercado. Si se queda no jugará, Aguirre no dará el paso atrás, además… ¿Porqué darlo por un jugador de mentalidad horizontal que lo único que aporta son 3 goles por temporada y un mínimo de consistencia defensiva?

El Señor Pitarch, por llamarle de alguna manera, piensa que este equipo será capaz de mantener en pie 3 competiciones, cumplir en dos y llegar a tener expectativas mayores que las del pasado año…. Por favor seamos realistas necesitamos incorporaciones y además incorporaciones decentes, no queremos mas CLEBERS ni JURADOS, estamos cansados que desde que subimos de aquel infierno no conseguimos mantener un equipo decente por culpa de las decenas de incorporaciones ABSURDAS.

PLANIFICACIÓN DEPORTIVA … ¿Lo has escuchado alguna vez Pitarch?

Y para acabar, no me quiero despedir sin nombrar al que quizás es el mayor éxito de la era GIL… La Sra. Rushmore, la agencia publicitaria rojiblanca que una vez más a mi parecer a cumplido con las expectativas exigidas. Que quede claro que soy ANTI-PUPISTA como el que mas… pero creo que el anuncio de este año no se entiende como se debería, el mensaje principal es la obligación de cumplir en EUROPA y no el catastrofismo de el que algunos se han quejado.